“Muy buena” es la calificación de la añada 2016, otorgada tras el análisis del informe realizado para el Consejo Regulador de la DO Navarra. Concretamente, por la Sección de Viticultura y Enología del Departamento de Desarrollo Rural del Gobierno de Navarra.
Un informe técnico que describe aspectos que hacen referencia al estado del viñedo, de la uva y los vinos elaborados.
DO Navarra logra una muy buena puntuación
Las principales características de la campaña pasada hacen referencia a la entrada de un otoño cálido. Con escasas precipitaciones que fueron un poco más abundantes en invierno.
Así, las necesidades hídricas de la viña en el inicio de la brotación eran satisfactorias, en general. Variedades de uva tempranas como la Chardonnay y Sauvignon Blanc empezaban a brotar a finales de marzo. Los meses de abril y mayo fueron fríos y propiciaron el retraso del ciclo de la vid.
La floración llegaba con más de diez días de retraso respecto al año anterior. Un retraso que se confirmaba en verano por la falta de precipitaciones.
La vendimia, más tardía que en anteriores campañas, daba comienzo en los últimos días de agosto, en la zona de la Ribera Baja. Protagonizada por la Chardonnay y el Moscatel de Grano Menudo como es habitual. El buen tiempo ayudó, con temperaturas calurosas en toda la región y la ausencia de precipitaciones.
Permitió una recogida selectiva, por parajes, con un ritmo lento y continuado. Entre las características más determinantes, destacaba el buen estado sanitario de la cosecha. Una graduación media de los mostos que mostraban una acidez total equilibrada.
La cosecha 2016, según los datos ofrecidos por EVENA, se ha distinguido en los vinos tintos por contar con una buena graduación alcohólica. Ligeramente inferior a la precedente, una acidez total menor, una intensidad de color superior a la media y una muy buena estructura.
En cuanto a los vinos blancos y rosados, el grado también es óptimo. Destacan por contar con un muy buen perfil aromático y buenos parámetros de color.