En la provincia de Burgos está la nueva y próxima Ciudad Europea del Vino 2020, tras la elección que cada año repite la Red Europea de Ciudades del Vino (RECEVIN). Después de haberse impuesto a otros lugares candidatos a dicho honor, finalmente la elegida ha sido la burgalesa Aranda de Duero. Por ella transcurre el río que le da nombre, pero también en sus tierras vinícolas permanece intacta una tradición cultural histórica. Porque la D.O. Ribera del Duero tiene una enorme importancia entre sus principales atractivos turísticos junto a otros de carácter monumental. Conoce más sobre este fantástico enclave de Castilla y León.
Claves de ser la Ciudad Europea del Vino
En general, esta ciudad reúne esas condiciones ideales para el nombramiento como Ciudad Europea del Vino, algo que le permitirá promocionar mejor su cultura vitivinícola y su gastronomía. Esa que se basa, sobre todo, en el lechazo asado pero también en la morcilla, las chuletillas de cordero o la torta local. Cualquiera de esos manjares típicos, siempre maridados con un buen vino tinto de la Denominación de Origen Ribera del Duero, es todo un deleite gastronómico para el visitante.
Por eso comentado y porque basa una parte importante de su economía en torno al vino, la localidad burgalesa ha sido escogida por delante de otras como Haro, Rueda o Cariñena. El pasado miércoles 6 se conoció esta noticia en una reunión de RECEVIN, donde participó ACEVIN como asociación española. Este certamen para elegir a la Ciudad Europea del Vino cada año tiene carácter rotatorio por países. La iniciativa tiene como principal objetivo fijar la mirada de todos en una única ciudad o región durante 365 días. Para así promocionar y potenciar su turismo.
De esa forma, Aranda de Duero ofrecerá a lo largo de todo el 2020 una serie de actividades culturales, académicas y divulgativas. Todas enfocadas a dar a conocer la gastronomía, el patrimonio y el paisaje natural de la ciudad, pero con la cultura del vino como hilo conductor. Las bodegas subterráneas -como la de Don Carlos– de distintos siglos serán todo un atractivo en este sentido junto a otras más modernas. Además, el visitante podrá ver algunos lugares emblemáticos desde la Iglesia de Santa María hasta varios museos. En definitiva, la experiencia en la nueva Ciudad Europea del Vino será enriquecedora.