Fin de Deliveroo… ¿Quién no ha pedido sushi, pizza, kebab o comida china a domicilio? Tu plato preferido de tu restaurante de confianza en la mesa de tu casa. La comodidad de recogerlo sin siquiera tener que ponerte los zapatos. Para disfrutar de la gastronomía del barrio desde el sofá de tu casa. Deliveroo es una de las grandes plataformas de comida a domicilio. Lleva operando en nuestro país varios años, sin embargo faltan apenas unos días para que llegue a su fin ¿Cuáles han sido las causas? ¿Qué ha pasado con todos sus empleados? ¡Sigue leyendo!
¿Cuáles son las causas del fin de Deliveroo?
El fin de la actividad de Deliveroo en nuestro país venía anunciándose por la propia empresa desde julio. Ahora, ha fijado fecha: el 29 de noviembre. La empresa ha achacado la decisión a su incapacidad por mantener los niveles deseados en España. Bien es cierto que el mercado español representa menos de un 2% del valor bruto de las transacciones de la compañía en el primer semestre. Sin embargo, muchos creen que el factor principal ha sido la entrada en vigor de la polémica ley Rider.
La ley de repartidores impuesta por el Gobierno en el verano trata de poner fin a los falsos autónomos del sector delivery. Esto implica que las empresas del sector deben convertir a sus trabajadores en asalariados. Hablando en plata: ponerles en nómina. Sin embargo, han sido bien pocos los que se han tomando en serio la norma, ya que los cambios no han sido muy significativos por el momento. Por eso sorprende la sincronía en las actuaciones de Deliveroo y del Gobierno.
¿Se ha marchado Deliveroo de España a raíz de la ley Rider? Algunos medios echan la culpa a Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, ya que fue su ministerio quién impulsó la ley. Sin embargo, este no es el único motivo ni el que más peso tiene. Quizás la implantación de esta ley haya sido la gota que ha colmado el vaso. Deliveroo no tenía una buena posición en el mercado español o, al menos, la que le gustaría tener. Para ello se requería una inversión demasiado elevada para la compañía. De hecho, España es el segundo país de Europa del que Deliveroo se marcha. El primero fue Alemania.
Deliveroo se marcha de España por la puerta grande
La compañía no ha querido dejar ningún cabo suelto. Y ha llevado con cuidado el despido de sus casi 3800 trabajadores. Desde sus inicios en España, Deliveroo no ha tenido queja por parte de sus trabajadores. Son muchos los que aseguraban las buenas condiciones que la empresa proporcionaba a sus empleados. Lo mismo ha ocurrido con las indemnizaciones. La ley española fija 20 días de salario por cada año trabajado. Para el fin de Deliveroo los empleados despedidos recibirán 45 días de salario por cada año de servicio.
La cuantía de la indemnización variará según la antigüedad y el salario percibido por cada trabajador. Sin embargo, Deliveroo ha establecido un mínimo: 1000 euros. Cualquier trabajador que haya trabajado en Deliveroo durante un año recibirá como mínimo 1000 euros, a pesar de que le correspondiera menos. Muchos empleados de la plataforma están agradecidos con la empresa, aunque lamentan perder su empleo. No obstante, es habitual que compaginarán su trabajo en Deliveroo con otras plataformas.
Queremos dar las gracias a todos los ‘riders’ y restaurantes que han trabajado con Deliveroo en España, así como a nuestros maravillosos clientes. La empresa se enorgullece de haber contado con algunos de los mejores restaurantes de España como socios y de haber colaborado con miles de riders que han trabajado duro para llevar a los españoles millones de deliciosas comidas desde 2015, incluso de haber sido una tabla de salvación para muchos de ellos durante la pandemia. Deliveroo
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¿Qué va a pasar?
El fin de Deliveroo no es algo que vaya a pasar desapercibido. Ha tenido un impacto en el sector de la entrega de comida a domicilio. De la misma forma, lo ha tenido en el Ejecutivo, ya que fueron muchas las críticas recibidas por esta ley. Y ahora serán muchas más debido al fin de la actividad de Deliveroo en España. La ley no ha sido el único motivo, pero quizás haya sido el detonante.
