Seguro que en más de una ocasión has escuchado que conviene evitar los hidratos por la noche. Pero… ¿Es esto cierto? NO. Los hidratos aportan a nuestro organismo elementos fundamentales para su correcto funcionamiento. Incluso, cenarlos puede ayudarte a bajar de peso. ¿Quieres saber de cuáles se tratan? Te contamos todos los detalles
Para comenzar… ¿qué son los hidratos?
Vamos a destripar el mito existente de que consumir hidratos por la noche es perjudicial para la salud. Esto se entiende debido que al hecho de que mientras dormimos, el metabolismo actúa más lento. Quemando así menos calorías. Sin embargo, esto no es del todo real. Los hidratos de carbono son uno de los macronutrientes fundamentales del organismo. Aportando azúcar, en forma de calorías, que se convierte en energía para el cuerpo.
Existen dos tipos de estos hidratos: los simples y los compuestos. Los primeros son aquellos que están formados por menos de dos moléculas de azúcar. Se caracterizan por ser fáciles de digerir y requerir la creación rápida de insulina. Esto puede desembocar en desequilibrios y acabar siendo perjudiciales. Algunos de estos alimentos pueden ser los propios azúcares, las frutas, la leche, los zumos, etc.
No obstante, en el otro lado encontramos los hidratos complejos. Estos, formados por más moléculas de azúcar, tardan más tiempo en digerirse. Evitándose así la rápida improvisación y formulación de insulina y manteniendo, de tal manera, su equilibrio estabilizado. Además, son beneficiosos debido a que convierten la grasa ingerida en la principal fuente de energía del cuerpo. Dentro de este grupo de alimentos saludables encontramos la cebada, la quínoa, el arroz integral, etc.
De dañino a beneficioso
No solo desmentimos que los hidratos por la noche sean perjudiciales, sino que advertimos de sus beneficios. Eso si, primero asegúrate de que tengan un índice glucémico bajo.
Para adelgazar
Una de las ventajas de comer hidratos por la noche es que ayuda a controlar el peso. Al hacer deporte, uno de los componentes que tu cuerpo desecha son los hidratos. Por ello su ingesta nocturna ayuda a la restauración del colágeno. Así como nos proporciona la glucosa necesaria para regular su nivel dentro de nuestro organismo. De esta manera, la energía almacenada podrá utilizarse para quemar más grasa corporal.
Para ejemplificar estos datos, se realizó un estudio. Contaron con una sección de la población dividida entre las edades de 22 y 55 años y les repartieron en dos grupos: el primero iba a consumir hidratos por la noche; mientras que el segundo lo haría durante el día. De tal manera, ambos ingerirían el mismo número de calorías y macronutrientes. Después de seis meses de experimento se hallaron los resultados. Estos concluyeron que aquellos que ingirieron los hidratos por la noche ¡perdieron un 2% más de peso y grasa!
Para el estado de ánimo
El cuerpo necesita hidratos por la noche y durante el día. Mientras dormimos, nuestro cuerpo continúa su proceso de eliminación de calorías. Es decir, sigue alimentando al cerebro, hace circular la sangre y regula el nivel hormonal. Especialmente, en el espacio nocturno, los niveles de sangre varían. Conllevando un posible riesgo de afección de la calidad del sueño, el nivel de energía y el peso. En general, de todo el estado de ánimo. Por ello se recomienda limitar el consumo de carbohidratos durante el día.
Pero, sin embargo, aumentarlos en las cenas. Eso si, aquellos de bajos índices glucémicos. Esto es debido a que los carbohidratos por la noche aumentan la serotonina y reducen hormonas como los cortisoles. Que limitan el riesgo de sufrir estrés. Estos factores no ayudan a conseguir tener un sueño más ligero y a sentirnos más relajados.
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Comer hidratos por la noche: ¿Sí o no?
Y es que un gramo de hidratos de carbono, al fin y al cabo, tiene la misma repercusión por el día que por la noche. No afecta la hora a la que decidas comer alimentos ricos en estos nutrientes. Asimismo, respecto a la pérdida de peso, esta depende en su mayoría en la diferencia entre el número de calorías que ingerimos y las que quemamos. Es posible que afecte la hora, pero no es un factor determinante. Nosotros, sin duda, basándonos en esto opinamos que consumir hidratos por la noche NO es malo. ¿Y tu? ¿qué opinas?
