¿Conoces la dieta keto? Existe una manera de acelerar la quema de grasa si comes poquísimos carbohidratos. ¿Es esto sano? ¿No es esta la dieta paleo? Descubre los secretos de la cetosis en este artículo. Veamos qué beneficios y qué consecuencias negativas puede tener. ¡Adelante!
¿Dieta milagro?
¿Es milagrosa la dieta keto? Nuestro primer paso será entender en qué consiste. Muy a grosso modo podemos definirla como una dieta con escasa presencia de carbohidratos. La ingesta de estos no debe superar los 20-50 gramos diarios. Así pues, con este mínimo aporte es como se consigue entrar en estado de cetosis. Cuando llevamos un tiempo sin apenas consumir carbohidratos el cuerpo agota las reservas de energía provenientes de estos.
Ello se debe a que los músculos se nutren, en primer lugar, de la glucosa en sangre. Una vez agotada, el siguiente paso será que el hígado transforme los ácidos grasos en cuerpos cetónicos. Se trata de unos organismos que el cuerpo humano utiliza también como fuente de energía.
Beneficios de la dieta keto
Puede ser útil, bien llevada, para quienes quieran perder peso. Con ella aceleras la quema de grasas, ya que se convierten en el principal combustible de tus músculos. Además, evitas que la energía no aprovechada de los carbohidratos se vaya acumulando en forma de grasa. Por si fuera poco, las dietas ricas en grasas y proteínas son más saciantes. Así pues, no tendrás ganas de picar a todas horas. También es beneficiosas para quienes busquen eliminar grasa en pos de definir músculo.
Contraindicaciones
Seguir esta dieta a largo plazo puede suponer un problema por el rápido desajuste al que se somete al cuerpo. Por esta razón es que se suele emplear para objetivos marcados a corto plazo. En casos extremos la dieta keto puede provocar cetoacidosis. Este es el fenómeno cure tiene lugar cuando los cuerpos cetónicos -ácidos- bajan el nivel de pH de la sangre, provocando que sea más ácida.
Esto afecta negativamente a los órganos. Sus consecuencias van desde el mal aliento al edema cerebral pasando por problemas de Orión, náuseas y calambres. Debido a todo el desajuste ya mencionado, tampoco es recomendable para personas con problemas de tiroides, riñón, hígado o páncreas. También deben evitarla personas con diabetes o trastornos alimentarios.
Diferencias con la paleodieta
Si leíste nuestro artículo sobre la paleodieta puede que te suene lo de limitar los hidratos. Si no lo has leído ya lo estás leyendo. Lo cierto es que la dieta keto difiere en la paleo en que esta segunda acepta un mayor número de hidratos. La fuente de estos son ciertas frutas y verduras. Así pues, definimos como cetogénica la que consta de 60-75% grasas, 25-30% proteínas y 5-10% hidratos de carbono. Nuestra recomendación es que la pruebes si te interesa pero tras una larguísima investigación y una consulta con tu médico.