Ya está aquí la Sal de AOVE. Una sal en escamas bañada y aromatizada con aceite de oliva virgen extra ecológico de Supremo. Consigue aportar un pequeño matiz al condimento por antonomasia en la cocina. Esta aromatización aporta a la sal un cierto color verde oro haciéndola (si cabe) aún más atractiva. Especialmente cuando la piedra se disuelve en la boca.
Una Sal de AOVE 100% de Jaén
Es la apuesta de Supremo por Jaén, ya que el producto se ha hecho 100% en la propia provincia. La sal se hace en la Finca “El Brujuelo”, a caballo entre los términos municipales de Jaén y Mancha Real. Demostrándose una vez más la riqueza tan amplia de esta provincia.
Esta salina, con más de 25 años a sus espaldas, está dirigida por Susana López. Ha sido este año cuando ha dado el salto de la mano de Supremo a la aromatización natural y artesanal. Lo hacen con esta Sal de Manantial con el AOVE de la Cooperativa San Juan.
Un producto fruto de la innovación
Sal de AOVE Supremo nace de la colaboración entre dos jóvenes emprendedores, Andrés García y Alberto Molinero. Así como la gran experiencia de la cooperativa San Juan de Jaén. De esta sinergia ya han cosechado más de 50 premios nacionales e internacionales.
Ahora nos sorprenden con este producto fruto de un trabajo de innovación. Si por algo se ha caracterizado Supremo en las cuatro campañas que tiene de vida ha sido por apostar claramente por la innovación agroalimentaria.
Fruto de este inconformismo llegaron apuestas como el caviar de AOVE Supremo, primero en Jaén. El monovarietal de Arbosana o el AOVE de Cornezuelo que supuso toda una revolución.
Esta innovación no solo ha sido la salida de productos nuevos, sino la puesta en marcha de campañas de comunicación y desarrollo de marca. Todas basadas en el diseño. También en la apuesta por el arte en sus etiquetas y en la forma de incorporar un proyecto tan arriesgado en una cooperativa.
El lanzamiento de Sal de AOVE ecológica se presentará la semana próxima en el salón Gourmets.
