Agárrate que se vienen curvas porque si piensas que las tradicionales botellas de cristal serán eternas para comercializar uno de los productos más prestigiosos del mundo, estás equivocado. Al igual que se venden otras bebidas muy populares en diversos envases sin tener vidrio, también este formato puede ser interesante para el vino en lata. Durante los últimos cinco años, ha ido ganando peso y ya es una categoría con fuerte crecimiento dentro del sector vinícola. Sobre todo, gracias a la buena acogida que han tenido los jóvenes ‘millennials’ con esta novedad para disfrutar aprovechando sus ventajas respecto a la botella de corcho. En Estados Unidos se han registrado ya unos datos que están sorprendiendo. Descubre más aquí.
¿Por qué está triunfando el vino en lata?
Podríamos hablar de una importante revolución con mucho futuro de continuar así. En la última feria ProWein de Dusseldorf (Alemania) ya se presentó esta novedad que valoró Paula Sidore, experta en tendencias, para La Vanguardia. «Las latas representan un aquí y un ahora en un estilo de vida sin complicaciones. No se requiere equipo extra porque son un contenedor único listo para abrir. Además, en la era de Instagram, son llamativas», piensa la también fundadora de Weinstory.
El vino en lata atrae, sobre todo, a los consumidores más jóvenes, cuando a la tradicional botella de cristal siempre le ha costado llamar la atención de este colectivo. Así, para los ‘millennials’, resulta mucho más accesible, ya que es cómodo de llevar a cualquier parte y también de beber cuando sea. Al tratarse de un envase ligero, sin riesgo al transportar e incluso más barato, lo prefieren.
Otro punto a favor es que el vidrio está prohibido en la mayoría de conciertos, festivales u otros eventos de este estilo. Por tanto, a la posibilidad de llevar el vino en lata se une su precio medio: suele costar entre 4 y 7 dólares para formatos de 37,5 centilitros, aunque también los hay de 25. La diferencia es abismal respecto a la botella, que cuesta entre 11 y 25 dólares. Lleva más cantidad sí (75 centilitros) pero con dos latas compensa.
Las bodegas españolas se suman a por el público joven
Quizás en un futuro el vino en lata se vea con mayor frecuencia y normalidad en el supermercado, al que todavía llega en muy escasa cantidad. Sin embargo, según los datos de la consultora Nielsen, en el país americano la categoría ya alcanza los 45 millones de dólares, aunque tan solo represente un 1 % del total. De todas formas, las ventas en este novedoso formato se incrementaron hasta un 69 % en valor y un 49 % en volumen durante el 2018. Estas cifras han supuesto todo un hito: jamás un envase alternativo al vidrio había registrado tales porcentajes de crecimiento hasta ahora.
Y viendo tal éxito, a algunas bodegas españolas se les ha ocurrido repetir la fórmula estadounidense para llegar a ese público joven. Esta venta del vino en lata puede ser una gran solución. ¿Se consolidará? Estaremos atentos, aunque la idea, de momento, tiene muy buena pinta.
