Es el grupo vinícola más antiguo de Canarias y por él han pasado ya hasta tres familias distintas elaborando unos caldos muy singulares de manera ininterrumpida. La bodega El Grifo puede enorgullecerse de reflejar en cada una de sus botellas la pura esencia volcánica que tanto caracteriza a la región donde se halla instalada. En un terreno de cultivo atípico, la viticultura artesanal que practican es de las más curiosas de España. A continuación profundizamos más en ella. ¡Sorpréndete!
Erupciones antes del origen
En la isla de Lanzarote, en Las Palmas de Gran Canaria, existe un enclave que ya resalta a vista de pájaro por las filas de viñedos que decoran de verde unas tierras desérticas y oscuras. Esas que llevan trabajándose de una forma muy peculiar desde el año 1775, cuando arrancó en la bodega El Grifo su asombrosa historia. Esta fue posible después de una de las últimas erupciones de los volcanes de la zona en 1736.
Esos fenómenos naturales expulsaron más de mil millones de metros cúbicos de lava que convirtieron el terreno en todo un paisaje volcánico único. Esa masa hirviente quedó solidificada junto a las cenizas de cada volcán y arrasó por completo con la flora existente. Pero la región central de la isla quedó como la más fértil para desarrollar algo mágico. Sí, nos referimos a la viña, posible de cultivar tras excavar agujeros en la lava o apartando esa arena volcánica para encontrar vestigios vegetales hundidos.
La primera familia que se aventuró a ello fue la de Los Ribera, propietaria de esas tierras antes de las erupciones. Estaban ubicadas dentro de lo que hoy es el término municipal de San Bartolomé. Además de plantar los cepos, se construyó el lagar, una casa y el primitivo edificio bodeguero, convertido hoy en museo. Después, tras un periodo complicado de disputas por la herencia de la finca, los De Castro adquirieron la propiedad y comenzó una nueva etapa que se prolongó hasta 1833.
Ya en las décadas de los 70 y los 80, la familia García Durán compró el terreno que gestiona actualmente la quinta generación de descendientes. La bodega El Grifo del presente fue construida por sus actuales propietarios, quienes preservaron también las edificaciones antiguas.
Particularidad del terreno volcánico
Todas las labores de los viticultores son desempeñadas de forma manual debido a las condiciones de un terreno tan particularmente volcánico. Este trabajo tradicional en el viñedo se ha ido completando después con las innovaciones introducidas por las nuevas generaciones. Entre ellas, el embotellado del vino con maquinaria pionera en las Islas Canarias o también los métodos y tipos de caldos elaborados.
Ahora bien, lo más característico y original lo encontramos en el conjunto de su terruño. Porque de este cabe destacar todos esos elementos que están ligados al suelo, así como al entorno moldeados por la erupción. Un paisaje casi asolado de vegetación de no ser por esas viñas que se alinean formando rectangulares filas en las que cada cepa está separada de otra por circulares muros de piedra volcánica. Estos abrigan a la plantación a pie franco, que se refiere a una vid no injertada, que forma parte de la misma planta.
Esa fue una técnica que nació como remedio para luchar contra la plaga de filoxera, que no llegó a afectar a las Islas Canarias. En cuanto a esos levantamientos de muros, sirven para frenar los vientos alisios que soplan con regularidad en la isla. Al final, los viticultores debían superar esos obstáculos de un terreno tan especial.
Vinos de la Bodega El Grifo
Las variedades vinícolas prefiloxéricas son las auténticas protagonistas de los vinos que se obtienen en la Bodega El Grifo. Entre ellas destaca la Malvasía Volcánica (la más importante de Lanzarote) y la Listán Negro (la más abundante de Canarias). Otras son Vijariego, Listán Blanco e incluso la famosa Moscatel.
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De sus caldos más relevantes cabe mencionar los de esa variedad principal con los vinos secos, semi y dulces. Por otro lado están los tintos e incluso rosados de Listán Negro o los catalogados como «especialmente raros». En su tienda online puedes encontrar todos estos productos tan exclusivos que ponen el colofón con algunas botellas de «dulces antiguos«. Porque en la familia lanzaroteña no olvidan la tradición vinícola.
En definitiva, te animamos a descubrir en sus visitas y catas esta canaria bodega El Grifo amparada por la D.O. Lanzarote. Una de las diez más antiguas de España pero que sorprende por ese toque volcánico tan original.
