Escribe: Margarita Llamas.
Todos conocemos las deliciosas galletas con trocitos de chocolate llamadas cookies. ¡Deliciosas! Pero, ¿conoces a su inventora? Fue Ruth Wakefield.
Nació en 1903 en East Walpole, Massachusetts. Se licenció en Framingham State University a los 20 años y a los 30 montó una posada junto con su esposo, Kenneth Donald, en una antigua casa de posta. Se llamó The Toll House Inn.
En los primeros meses solo tenía 12 empleados. Tres años más tarde había 50 personas detrás de ella en un modesto imperio. Tenía varios locales añadidos al original. En 1938 más de 100 trabajadores servían alrededor de mil comidas al día.
Ella cocinaba y un día no tenía cacao en polvo para mezclar con la masa de galletas y darle ese color marrón. ¿Qué podía hacer? Con una tableta de chocolate hizo trocitos e inventó estas deliciosas galletas que vendió durante años, las Toll House Crunch Cookies, mencionadas en periódicos locales y muy conocidas. Esta es solo una hipótesis.
¿Fue un accidente o lo hizo a propósito? Sobre esto hay muchas teorías que ella misma defendió.
«Habíamos estado sirviendo una galleta de nuez fina con helado de crema. Parecía que a todos les encantaba, pero estaba tratando de darles algo diferente. Así que se me ocurrió la galleta”
La receta original en un envoltorio de Nestlé.
Las madres se las mandaban a los soldados y se fueron extendiendo y conociendo. Se vendían en las tiendas locales. Nestlé se enteró y quisieron comprar esta fórmula tan original.
Ruth Wakefield cedió su creación a Nestlé
¿Pero cuánto costaría? Ruth Wakefield se hubiera podido retirar, pero no fue así. Ella sólo pidió un dólar, que su receta original y su nombre aparecieran en las cajas de producción de cookies de Nestlé y chocolate Nestlé gratis hasta el final de sus días. Falleció en 1977.
Los primeros paquetes de galletas tenían esta imagen
En New Yorker se explica que, posiblemente, Ruth Wakefield trabajó como experta para la compañía durante años. Dadas sus dotes culinarias y su conocimiento académico de la gastronomía, no extrañaría a nadie.
Una mujer emprendedora y generosa que también escribió un libro de cocina ‘superventas’: Toll House Tried y True Recipes.
El logotipo y el nombre de Toll House formaron parte de los paquetes de pepitas de chocolate Nestlé con la fórmula al dorso.
La empresa sigue cumpliendo su parte del trato. Los herederos de Ruth Wakefield continúan viviendo de la fortuna que materializaron sus antepasados. Se rumorea que el restaurante Wakefield recibió chocolate gratis durante el resto de su vida.
Si siguiéramos sus innovadoras recetas, ¿con qué enriquecerías una masa de galletas en la actualidad? Prueba este ejemplo del vídeo que te presentamos a continuación.