Escribe: Cátedra Cubana de Gastronomía y Turismo
Es imposible hablar de Cuba y no mencionar la bebida típica que nace de su mejor caña de azúcar. Así es, el ron. Se trata de un destilado de aroma limpio y complejo, de sabor suave y afrutado. En el que se condensan la historia, la cultura y la verdadera esencia de lo cubano.
Aunque toda la región del Caribe presume de tener los mejores rones del mundo, el que se produce en Cuba hace gala de un know how único. A partir de la conservación de los más antiguos aguardientes y rones bases de esta bebida. Los maestros roneros combinan en un meticuloso proceso de mezclas y añejamientos.
Corporación Cuba Ron S.A.
Fue esta organización la encargada de rescatar esta historia, tradición y herencia de más de un siglo. De organizar todo lo que en cultura ronera prevalece en la industria. En ese afán fortaleció sus fábricas y desarrolló productos que hoy satisfacen los más disimiles gustos y mercados.
Esos que se caracterizan por su limpieza, transparencia, brillantez y durabilidad. Garantizando siempre un valor sensorial libre de saborizantes y esencias artificiales.
Precisamente los factores naturales, la herencia cultural de los maestros roneros y el exigente control sobre el proceso productivo fueron elementos distintivos suficientes. Así, el ron cubano es ya desde hace tiempo acreedor del reconocimiento de la Denominación de Origen Protegida Cuba.
Marcas de ron en Cuba
La alta calidad, características inconfundibles y el prestigio del ron cubano en el mercado internacional lo hacen merecedor de una protección eficaz de su imagen. Así, resguarda a sus consumidores de falsas indicaciones de origen de productos no cubanos de similar naturaleza.
Esto, a partir del éxito comercial de la marca Havana Club y la presencia creciente de otras como Santiago de Cuba. También Cubay, Varadero, Caney, Legendario, Arecha, Mulata y Santero.
Con base en lo anterior, adscrito al Ministerio de la Industria Alimentaria, se creó el Consejo Regulador de la DOP Cuba para rones. Igualmente, se puso en vigor su reglamento. Este es necesario para incorporar la descripción del producto acreedor de la Denominación de Origen Protegida Cuba. O, por otro lado, la especificación de los procesos de fermentación, destilación del aguardiente y añejamiento.
