La macis es una especia versátil que puede elevar el sabor de platos dulces y salados gracias a su aroma cálido y ligeramente dulce. En realidad la macis es la envoltura de la nuez moscada. Muy utilizada en la cocina india y china. En la cocina europea se be utilizar en pequeñas proporciones para aportar sabor y también textura. Aquí tienes algunos consejos prácticos para usarla en la cocina y descubrir nuevos sabores:
Usos en platos salados
Guisos y curris: Incorpora macis molida o en trozos pequeños para enriquecer el sabor de guisos, estofados y mezclas de especias como el garam masala.
Sopas y caldos: Añade un trozo de macis entera durante la cocción para dar un toque aromático a caldos de pollo, carne o vegetales. Retírala antes de servir.
Arroces y risottos: Mézclala en pequeñas cantidades con arroz basmati o risotto para un aroma único y sofisticado.
Carnes: Úsala en marinadas o como parte del condimento para carnes asadas, guisadas o preparadas al horno.
Usos en platos dulces
Repostería: Agrega macis molida a masas de galletas, bizcochos o panes especiados como el pan de jengibre.
Postres cremosos: Úsala para perfumar natillas, pudines o arroz con leche. Una pizca es suficiente para aportar calidez.
Bebidas: Añade un toque a bebidas calientes como chocolate, café o té chai. También funciona bien en cócteles con especias o licores calientes.
Algunos consejos para usar macis
Dosificación: Es más suave que la nuez moscada, pero debe usarse con moderación, ya que su sabor es intenso.
Formas de uso: Puedes usarla entera para infusiones y cocciones largas, o molida si necesitas un sabor más inmediato y uniforme.
Combinaciones: Combina bien con canela, cardamomo, clavo y pimienta para crear mezclas especiadas equilibradas.
La macis es ideal para dar un toque gourmet a tus recetas y resaltar sabores sin opacarlos. ¡Experimenta y disfruta su aroma único!