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Villa Escudero: restaurante en la cascada

«Villa Escudero Plantations and Resort», un complejo ecoturístico ubicado en la provincia de Quezon, en Filipinas, es el anfitrión de un restaurante de lo más exótico, «Labassin Waterfall Restaurant». En español, «El Restaurante Cascadas de Labasin», de renombre mundial gracias a la experiencia única que ofrece a sus comensales. Disfrutar de la gastronomía rural filipina junto a una preciosa cascada mientras remojas tus pies en el agua. Si te gusta viajar este lugar te sorprenderá por el encanto del que presume, intrínsecamente, ligado a su historia ¡Sigue leyendo!

«Villa Escudero Plantations and Resort» alberga un restaurante único

El «resort» es, en realidad, una plantación de coco de trabajo autónomo. Fue fundada a finales del siglo XIX por Don Plácido Escudero y su esposa Doña Claudia Marasigan. Su heredero construyó la primera planta hidroeléctrica en funcionamiento del país la cual sirvió para abastecer su fábrica de coco seco y Villa Escudero (construido en 1929). En 1981 los segundos herederos abrieron la propiedad al público. Desde entonces, es uno de los destinos turísticos favoritos de los filipinos y, cada vez más, resulta muy atractivo para los visitantes extranjeros.

Villa Escudero
Labassin Waterfall Restaurant/Fuente: Okdiario

Villa Escudero representa la vida rural filipina en su máxima plenitud. Comer el almuerzo buffet tradicional filipino, estilo kamayan (comida que se come con las manos al estilo familiar en el país filipino), bajo el frescor que desprende una cascada natural. Visionar el espectáculo de danzas nativas filipinas, casi olvidadas en muchas regiones. Dormir en alojamientos fabricados con bambú natural que favorecen la ventilación natural mientras escuchas el sonido de los pájaros y la corriente del río.

En definitiva, «El Restaurante Cascadas de Labasin» es una experiencia gastronómica única a tan solo dos horas de Manila. Además, el precio por noche de las habitaciones de esta antigua plantación convertida en «resort» no son desorbitados como podríamos pensar. El precio por noche oscila entre los 122 euros la habitación más básica y los 205 euros la suite presidencial para dos personas. Además, el complejo cuenta con un museo privado que alberga una gran colección de antigüedades. Es perfecto para pasar un día inmerso en la cultura filipina en todos sus sentidos, «cocina, vestimenta, costumbres y belleza natural».

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