El etiquetado del vino se encuentra en el punto de mira. El Parlamento Europeo ha puesto sobre la mesa incluir mensajes de advertencia en las botellas de vino. El objetivo es alertar a los consumidores del riesgo de contraer cáncer asociado al consumo de alcohol. Según el informe del cabecilla de la propuesta existe un vínculo directo entre la ingesta de bebidas alcohólicas y el cáncer. A pesar de la gran recuperación del mercado del vino en España la preocupación ya ha llegado a todas las bodegas, así como al sector hostelero. Si quieres saber más, ¡sigue leyendo!
El etiquetado del vino influye en su consumo
El sector vinícola ya ha mostrado su intranquilidad frente a las futuras consecuencias de la nueva medida. Aunque la decisión de su implantación aún no es definitiva, el mero hecho de su estudio ya inquieta a todos los actores implicados. En caso de que esta medida se pusiera en práctica, ¿sería efectiva? ¿Disminuirían las ventas? Bien, pues en 2017 un grupo de investigadores se hicieron la misma pregunta y decidieron averiguarlo. El estudio se llevó a cabo en Canadá, concretamente en la mayor tienda de licor de Yukón, territorio con la tasa más alta de consumo de alcohol.
Los investigadores pusieron 300.000 etiquetas de advertencia bastante coloridas y visibles en botellas y latas de alcohol. En total, el 98% de los productos de la tienda contenían mensajes de prevención ¿Cuál fue el resultado? Las ventas disminuyeron un 6,6% en comparación con las tiendas en las que las bebidas no estaban etiquetadas. También descubrieron que el etiquetado de advertencia hacía que los clientes fueran un 10% más propensos a recordar el vínculo entre el alcohol y el cáncer
A pesar de los grandes esfuerzos de los grupos de presión de la industria del alcohol de Canadá por cerrar nuestro estudio y mantener a los consumidores desinformados, encontramos evidencias de que las etiquetas de advertencia ayudaron a los bebedores de Yukón a estar mejor informados sobre los riesgos de salud del alcohol, y animaron a muchos a reducir su consumo. Tim Stockwell, director del Instituto Canadiense de Investigación sobre las Sustancias en Victoria.
¿Cuáles serían las consecuencias del nuevo etiquetado del vino?
Además de esta investigación está demostrado que las etiquetas de advertencia en las cajetillas de los cigarrillos han resultado efectivas. Muchas personas han dejado de fumar influenciadas por ellas. Así, se han convertido en un elemento clave en la lucha contra este grave problema de salud pública. Por tanto, es de esperar que el etiquetado del vino suponga consecuencias negativas para el sector, así como positivas para la salud de las personas.
📰 Olga Viza, sobre el posible etiquetado del vino con advertencias sobre la salud
🗣 “¿La UE lo hace para que descienda el nivel de alcoholismo en Europa o es por el cáncer? Si es por el cáncer, habría que etiquetar infinidad de cosas de la industria alimentaria”#MejorContigo pic.twitter.com/Z0xMIUjlAX
— MejorContigoTVE (@MejorContigoTVE) January 27, 2022
El riesgo del cáncer y el alcohol
La evidencia científica ha demostrado que los bebedores de alcohol presentan mayor riesgo de padecer cáncer que aquellos que no bebieron nunca. Asimismo, el riesgo aumenta en relación con el nivel de consumo. El Programa Nacional de Toxicología del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos incluye el consumo de bebidas alcohólicas como un conocido carcinógeno humano. Los cánceres asociados con el consumo prolongado en el tiempo de alcohol son el cáncer de cabeza y cuello, esófago, hígado, seno y colorrectal.
Aunque el convencimiento de que una copita de vino al día es saludable esté muy extendido en la sociedad, la realidad es distinta. Bien es cierto, que el consumo de una copa de vino al día puede reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular. Pero, ojo, únicamente en varones mayores de 45 años y mujeres de más de 55 años. Sin embargo, se trata de casos muy concretos y en personas que cumplan ciertos patrones. Si quieres saber más sobre esta afirmación tan polémica te recomendamos leer este artículo de El País.
El alcohol es la sustancia responsable del 6% de las muertes anuales en el mundo. El vino, tinto o blanco tiene una graduación entorno al 10-15% de alcohol. Lógicamente no hablamos de la misma cantidad que puede llevar una botella de whisky (entorno al 40%), por ejemplo. No obstante, la población debe conocer sus posibles riesgos para la salud, ya que se trata de una bebida muy normalizada en la sociedad. Y, no debemos olvidar que hablamos de una sustancia que puede causar adicción y que no todo el mundo tiene la misma vulnerabilidad. Y tú, ¿Qué opinas?
