Las sorprendentes creaciones de ‘birra’ por parte de empresas artesanas no dejan indiferente a nadie. Ahora, nos llega la noticia de una exclusiva cerveza de cereales Choco Krispies. Bajo el nombre de Rosita Kellogg’s, esta tipo Blonde Ale ha sido elaborada por la cervecera tarraconense La Gardenia con un claro objetivo. Porque quiere darle una segunda vida a ese arroz tostado con cacao que la famosa compañía de alimentación desecha y no utiliza para que forme parte de una fascinante bebida única. Aquí te contamos más sobre el origen de la idea, además de darte todos los detalles de esta cerveza tan atractiva. ¡Seguro que desearás probarla!
Sostenibilidad medioambiental e idea británica
Aunque esta nueva cerveza de cereales Choco Krispies haya tenido su nacimiento aquí en España, concretamente entre las sedes de ambas empresas, la idea es británica. En Manchester (Reino Unido), la compañía Kellogg’s tiene una fábrica y hace más de un año que decidió colaborar con una cervecera. Seven Bro7hers, ubicada en el distrito urbano de Salford, comenzó a desarrollar la propuesta dando como resultado la cerveza Throw Away IPA. Se había elaborado con desperdicios de copos de maíz Corn Flakes, suministrados por la citada firma de producción de cereales comerciales.
Pues bien, esa novedad tuvo un éxito muy positivo entre los ‘beerlovers’, así que más tarde se amplió la colaboración recogiendo esos otros alimentos a los que no se les iba a dar uso: Rice Krispies y Coco Pops. Ahora, la cervecera artesana La Gardenia -muy concienciada con aportar su granito de arena a la reducción del desperdicio alimentario- ha decidido copiar esa fórmula en pro de la sostenibilidad. Porque más allá de la fabricación de la Rosita Kellogg’s está el cultivo del arroz en el Delta del Ebro, un trabajo que debe ser de futuro.
Por eso, el compromiso se dirige hacia la aportación económica a entidades no lucrativas que promuevan la producción sostenible de dicho alimento en esa zona natural. Gracias al programa Origins de Kellogg, los agricultores catalanes están mejorando la sostenibilidad tanto económica como medioambiental del cultivo.
Un arroz en perfectas condiciones de consumo
Al igual que en el ‘caso británico’, la cerveza de cereales Choco Krispies se puede elaborar en la provincia catalana porque hay una fábrica de Kellogg’s en Valls (Tarragona). Muy cerca de allí, en Alcover, tiene su sede Cervezas La Gardenia, cuyo éxito en la elaboración de birra artesanal puede verse reflejado en otras cervezas. Por ejemplo, la más gourmet que se ha colado en algunos de los mejores restaurantes de España. Sin embargo, el éxito tanto actual como del futuro se le podría asociar a esta nueva creación exclusiva.
El arroz tostado con cacao rechazado en la línea de producción es totalmente apto para el consumo humano. Pero se desecha por diversas causas: envases dañados, variaciones de gramaje… Un fallo en cualquier punto del proceso puede convertir en excedente un producto en condiciones para comerse. Cabe recordar que desde hace décadas, esos desechos de Kellogg’s en España van donados al Banco de Alimentos. Así, la compañía está igualmente enfocada para contribuir a generar menos residuos en el planeta.
Así es la cerveza de cereales Choco Krispies
Pep Pérez, cofundador de La Gardenia, explica cómo es el proceso de obtención de la cerveza de cereales Choco Krispies en el que ha sido «un reto divertido» del que están «orgullosos:
«La elaboración se realiza de forma sostenible, implementando políticas y procedimientos para reducir el consumo de energía y de agua, así como las emisiones de carbono. También usar energías renovables, revalorizar los residuos y utilizar progresivamente materias primas de proximidad»
Después de todo el proceso, el resultado es una Rosita Kellogg’s Choco Krispies compuesta por agua, malta de cebada, miel, lúpulos y levaduras. Tiene un color rubio, de carbónico fino y elegante, ofreciendo cierta densidad en copa junto a una espuma blanca cremosa con tonos marfil. Goza de buena persistencia. Su nota de cata revela que es «dulce y golosa al principio, para pasar a notar todo su volumen aromático y gustativo». Se aprecian también «notas a grano tostado, recuerdos a miel, a cereales torrados y a fruta madura». Tiene «buena acidez que hace que su paso por boca no sea pesado». Mientras que ya al final se degustan «notas sutiles a cereal y chocolate».
Su temperatura de servicio ideal oscila entre los cinco y los siete grados centígrados. Así que si deseas probar esta cerveza de cereales Choco Krispies, ya sabes. ¡Seguro que aporta a tu paladar una experiencia única!
