Los expertos y no tan expertos auguran que son el alimento del futuro. Ya se llevan consumiendo bastante tiempo en numerosos países del mundo pero en el continente europeo todavía es una tarea pendiente. Lo calificamos así porque más pronto que tarde podrás encontrar insectos comestibles en España pero producidos en nuestro país. Mientras esa puerta no se abre, estos productos revolucionarios de nuestra alimentación solo se pueden adquirir para consumo humano si proceden de otros puntos del globo. En Valencia existe una pionera tienda especializada en la venta de todo tipo de especies de invertebrados. ¡Sorpréndete con su amplia oferta!
Una legislación por madurar
La llegada de estos animales al panorama alimentario mundial se encuentra todavía con un vacío legal importante a la hora de su comercialización y consumo en ciertos países. Es el caso de España, donde sí es posible venderlos al público pero si su origen no está en las granjas que los crían dentro de nuestras fronteras. Si bien existen esos criaderos en cada vez más rincones de nuestro país, la producción se destina a la alimentación animal o a la elaboración de otros productos con materia prima de insectos.
Gracias a eso es posible encontrar ya barritas energéticas como las de Trillions pero no comer directamente la especie como tal con sus partes y ese aspecto, en algunos casos, espeluznante. La legislación europea en esta materia llevará su tiempo hasta que sea una realidad porque se debe confirmar el riesgo cero para autorizar el consumo. Ya se están estudiando propuestas de distintas empresas para producir diferentes especies de forma que se puedan convertir en una opción alimentaria más.
Siguiendo esa línea, los insectos comestibles en España criados aquí serían posibles con la autorización de algunos grillos, escarabajos y langostas. Así lo cree AECOSAN que insiste en que esa novedosa industria debería cumplir con unos requisitos mínimos obligatorios, además de otras exigencias. Todo para que quede asegurada la seguridad alimentaria del producto.
La oferta de Insectum
Una aventura que arrancó hace tres años solamente con venta online de insectos comestibles en España, ya en 2020 pasó a tener tienda física en el popular mercado de Ruzafa de Valencia capital. Con cercanía a la gente que pasa por allí, Insectum ofrece una amplia variedad de invertebrados para que curiosos, atrevidos o experimentados los compren. Si nunca los has comido pueden recomendarte la mejor opción para que te estrenes con estos alimentos llenos de proteínas y con funciones importantes en el ecosistema natural.
Entre las hormigas tienes tejedoras, culonas o negras. De grillos puedes encontrar distintas recetas con ellos como los bañados con chocolate incluso o las anteriormente citadas barritas. En cuanto a gusanos la carta es igual de abierta hasta con más propuestas de todo tipo y con varias especies como los buffalo o los del bambú. La sal de este insecto es muy curiosa.
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Por otro lado están los chapulines con tres recetas. Si no te suenan, son una especie de saltamontes, aunque de estos últimos también tienes productos exclusivos, así como de langostas. De escarabajos tienes los más comunes y los conocidos como buceadores. Ya en la categoría de cucarachas, sorprenden las gigantes de agua mientras que los escorpiones son otros insectos muy curiosos. Aunque si hay uno que es impresionante es… ¡la tarántula de Camboya!
Otros productos de insectos comestibles en España
¿Te comerías alguno de esos bichos? ¿Cuál crees que te gustaría más? ¿Te los imaginas en la dieta del futuro integrados en recetas de cualquier restaurante español? Si todavía no eres tan atrevido, puedes comenzar probando otros productos elaborados con materia prima de insecto. Insectum ofrece galletas, dulces, pastas, patés e incluso… ¡una cerveza!
Lo cierto es que cualquier alimento final puede obtenerse con unos ingredientes así y la experimentación continuará hasta que sean realidad muchos otros. De momento tienen gran aceptación también los suplementos alimenticios elaborados con insectos y las harinas de gusanos o grillos.
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En definitiva, es evidente que poco a poco irán entrando cada vez más en el sector gastronómico y que los insectos comestibles en España serán habituales dentro de un tiempo. Habrá que ver, eso sí, si la cultura occidental los acepta igual que en países orientales. ¿Qué opinas?