El periodo de pesca certificada un pescado muy particular empieza en el mes de mayo y finaliza en el mes de septiembre-octubre, dependiendo del cupo de pesca asignado. Este año las capturas han sido buenas y en estos primeros días de agosto llegamos al 75% del total de la pesca permitida. Descubre aquí por qué comer bonito del Norte, de temporada ahora, cuando ya ha acumulado más grasa y es más sabroso. A todo ello se le suma que es pescado con artes tradicionales, que tiene una excelente calidad y que, actualmente, se certifica y controla su sostenibilidad. ¡Aprovecha el momento!
Pesca certificada en el Golfo de Vizcaya
La pesquería se dirige al bonito en el Golfo de Vizcaya y aguas adyacentes. Por este motivo se le conoce como bonito del Norte, ya que se obtiene en esta zona del norte español. Las capturas se realizan mediante las artes de caña y curricán. Son métodos tradicionales que mantienen las poblaciones en buen estado y apenas generan capturas incidentales, además de aportar una calidad excepcional.
El control de la pesca se realiza con certificados de pesca como el de MSC, que contribuye a la buena gestión. Todo ello da garantías al consumidor de que esta pesca se ha realizado de forma controlada garantizando la sostenibilidad. Estos certificados son cada vez más necesarios para toda la cadena de alimentación.
Este tipo de pesca certificada, además, está consiguiendo que el 98% de las capturas sean de la especie que se tiene como objetivo capturar. En caso de pescar otra especie, la flota ha adoptado un código de conducta. Este establece acciones a realizar en el caso de cetáceos, aves y tortugas, asegurando la liberación segura y la máxima supervivencia.
Estado de la población del pescado en 2020
¿Por qué comer bonito del Norte? Este es un atún de aguas cálidas, distribuido ampliamente a través del océano Atlántico y el mar Mediterráneo. Las evaluaciones del estado de la población realizadas por la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico muestran que ha mejorado en los últimos años.
En 2015, la biomasa de la población se encontraba por encima del rendimiento máximo sostenible. Actualmente, la pesquería ha contribuido de manera positiva al desarrollo y adopción de un conjunto de reglas de control de capturas que permiten realizar una pesca sostenible. Sellos de garantía como los de MSC ya se encuentran en grandes superficies como Eroski y Makro. Estos dan la tranquilidad de consumir un pescado de calidad, asegurar el futuro de la especie y ser respetuoso con el medio ambiente.
Uno más entre los atunes
Dentro de los atunes podemos diferenciar tres grandes grupos. En primer lugar el más popular y con el que se elaboran la mayoría de conservas es el atún claro. Su nombre científico es Tunnus Albacares. Su tamaño es algo mayor que el del bonito del Norte, llegando hasta los 45-50 Kg de peso. Se diferencia también porque la aletas tienen una tonalidad amarilla, por ello algunos lo llaman atún de aleta amarilla. Es el más pescado, actualmente, y el más económico. Suele tener un porcentaje de grasa del 10%.
El atún que, actualmente, goza de más prestigio y precio es el llamado atún rojo. Su nombre científico es Thunnus Thynnus. Su tamaño puede llegar a sobrepasar los 500 Kg. Es un animal fuerte, resistente y muy voraz. Su carne es roja, sabrosa y con una grasa muy infiltrada. Se desplaza grandes distancias y en nuestras costas se pesca en el periodo de desove, en los meses de junio y julio.
Por último, nuestro gran protagonista. ¿Por qué comer bonito del Norte? Pertenece a la familia de los escómbridos que se diferencian en dos tipos: el Bonito del Sur, conocido con el nombre de bonito del Atlántico o bonito común, y el Bonito del Norte. Su nombre científico Thunnus Alalunga también es conocido como atún blanco. Su tamaño llega al metro de longitud y su peso hasta los 15 kg. Se reconoce por la longitud de su aleta y por tener un color más blanquecino y azulado. Su carne es muy fina y apreciada.
Por qué comer bonito del Norte
Como todos los pescados azules, el bonito es un alimento rico en grasas Omega-3, es decir, nos aporta el 6% en grasas saludables. Su proteína es de un gran valor biológico, no tiene hidratos de carbono y nos aporta pocas calorías. Añadir que su nivel glucémico es también muy bajo. Por todas estas propiedades el bonito del Norte puede formar parte de muchas dietas saludables.
En cuanto a los minerales destaca su aporte en yodo, potasio, fósforo, hierro y magnesio. También nos aporta vitaminas, en especial vitaminas del grupo B (como la vitamina B2, B3, B9 y B12), D y A.
Además de aportar beneficios para todas las personas con problemas de colesterol, su exquisita carne nos da la oportunidad de disfrutar de diferentes formas en la cocina. Desde cocinados a la plancha, en fritura, al horno, en tomate, con verduras hasta los famosos marmitakos nos proporcionan un pescado muy versátil y rico que tenemos al alcance por precio muy razonables. Ahora que ya sabes por qué comer bonito del Norte, ¡aprovecha para introducirlo en tus platos!