La receta de mofongo va más allá de Puerto Rico. Es el plato del que más se enorgullecen los boricuas. ante los recién llegados a su país. Fruto de la fusión española, taína y africana; presenta varias formas ya que no solamente se cocina en Puerto Rico. Con el tiempo han aparecido nuevas corrientes e innovaciones que enriquecen este delicioso plato. Es por ello que podemos encontrar recetas similares en varios países de la zona.
La receta de mofongo de Puerto Rico
La receta de mofongo puertorriqueño no es compleja. En primer lugar, se cortan rodajas del plátano macho verde y se fríen con sal. No sirve el canario o la banana al ser estos demasiado blandos. Posteriormente se machacan en un mortero junto con ajo y aceite. Una vez se forma la pasta se introducen chicharrones de cerdo en ella dentro del mortero. También hay quien lo hace con camarones. Se comprime y se saca con la ayuda de una cuchara. Queda con forma de bola o de vaso. A veces se come con caldo de pollo.
Mangú dominicano
Solo media hora de vuelo separa Puerto Rico de la República Dominicana. Además, hay una comunidad inmigrante importante de dominicanos en lugares de la isla como Santurce. Estos interactúan con la gastronomía local y le dan su propio sabor. Es más, ambas naciones reclaman para sí la invención del mofongo ya que comparten los mismos orígenes étnicos.
El mangú no es exactamente igual pero comparte fundamentos. La principal diferencia es que el plátano se cuece antes de machacarlo, no se hierve. Una vez machacado se presenta en forma de bola similar a la del mofongo. Encima de la masa se colocan tiras de cebolla frita. Esta hortaliza es muy consumida en la República Dominicana.
A diferencia del mofongo, este no va relleno de chicharrón. El mangú se puede comer solo con la cebolla. No obstante, se suele servir como desayuno acompañado de huevo, queso y salami. Este plato se conoce como “los tres golpes”. La tradición dice que el termino mangú proviene de “man, good!”. Esto era lo que exclamaban los soldados estadounidenses al probarlo durante la invasión.
Trifongo
Esta variedad del mofongo sí viene de la isla del encanto. Para la masa se necesitan tres cosas. Un plátano macho verde, un plátano macho maduro y 100 gramos aproximadamente de yuca. Se fríen en rodajas con sal y se machacan juntos en el mortero con ajo y aceite, además de trocitos de chicharrón o bacon. Es más usual ver bacon en trifongo que en mofongo.
Mofongo Low Cost
Comer es caro en Puerto Rico. Hay poca diferencia de precio entre comer en casa y en un restaurante. Esto es debido a que la mayoría de alimentos son importados. Por ello es que la alternativa más económica al chicharrón de cerdo son las cortezas de bolsa. Se añaden al mortero junto al ajo, el plátano y el aceite. Se machaca todo junto. Hay quienes optan por mantequilla en lugar de aceite.
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Bolón de verde
Plato típico de la costa ecuatoriana. Se suele servir como desayuno. Consiste en machacar el plátano verde frito con ajo y aceite. Después se sirve la bola resultante que le da nombre. A veces va sola y otras se rellena de chicharrones o de queso. Es usual volver a freír la bola para que quede más crujiente. Esta se acompaña normalmente de huevo, guindilla y café.
Tacacho
Procedente de Perú. Tiene muchas similitudes con la receta de mofongo. Así pues, la bola de plátano frito machacado con chicharrones se prepara igual que el puertorriqueño. La única diferencia es que se utiliza manteca de cerdo en el mortero. Se acompaña de cecina de cerdo y de chorizo normalmente. Su nombre proviene del quechua: taka chu. Este término significa «lo golpeado». No es tan popular como otros platos en los restaurantes peruanos en Madrid y España en general.
Más allá de Puerto Rico
Estos son varios ejemplos de un mismo plato en distintos lugares. Son territorios donde han entrado en contacto las poblaciones locales con los colonizadores y con los esclavos africanos. La mezcla resultante es una riquísima tradición gastronómica.
La receta de mofongo va más allá de Puerto Rico. No obstante, dentro de la propia isla hay varias corrientes. Es por ello que son millones de personas las que tienen el privilegio de vivir en un país con un plato típico tan sabroso.
