Los hosteleros tienen la obligación de ofrecer un vaso de agua del grifo gratis a sus clientes desde el pasado lunes 11 de abril. Contrario a la creencia ampliamente extendida, no era forzoso antes de la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular. Así pues, quedaba a discreción de cada local. Sin embargo, la nueva ley introduce este y otros cambios. ¿Qué papel le reserva a la venta a granel? ¿Cumplirá sus objetivos? ¡Vamos a verlo!
Vaso de agua y otras medidas contra el plástico
El objetivo es fomentar el consumo de agua potable en espacios públicos. Lo hará mediante la instalación de fuentes de agua y el uso de envases reutilizables. De esta manera busca reducir los desechos por plástico.
Otro cambio importante que introduce es la prohibición de vender algunos plásticos de un solo uso. Entre ellos encontramos táperes de comida para consumo inmediato, bastoncillos, vasos y cubiertos. Además, para fomentar el consumo sin plásticos, obliga a las superficies de más de 400 metros cuadrados a dedicar al menos el 20% de su superficie a los productos sin envalaje. Dentro de esta entran tanto la venta a granel como los envases reutilizabas. Así pues, nos recuerda un poco a la lucha de Francia contra el plástico.
Por el contrario, para fomentar a los consumidores a adquirir productos sin plásticos, la misma normativa del vaso de agua aplicará un reglamento especial a los establecimientos de más de 400 metros cuadrados. Será necesario que dediquen almenos el 20% de su espacio a productos sin embalaje, con venta a granel o a través de envases reutilizables. ¿Crees que funcionarán estas medidas para reducir de forma significativa el uso de plástico? ¿Podemos resolver así el problema de los microplásticos o es una ley poco ambiciosa?
