Llega el verano, y con él, las frutas de temporada. Entre ellas se encuentran las ciruelas, un alimento rico en sabor y en propiedades beneficiosas para nuestra salud. Te contamos todos los detalles acerca de esta superfruta.
Una fruta amiga de nuestra salud ósea
Las ciruelas son una fruta que se consume durante los meses de verano. Se trata de un alimento de diferentes variedades y gustos, desde las más ácidas hasta las más dulces. Diferentes estudios han dictaminado que este producto contiene innumerables nutrientes que repercuten positivamente en nuestra salud. Sobre todo es importante la presencia de carbohidratos y polifenoles, capaces de alterar la microbiota intestinal.
El principal beneficio está estrechamente relacionado con nuestra salud ósea. Esta fruta recibe los nutrientes a través de nuestro aparato intestinal, lo que provoca la mejora de nuestro sistema inmune y el proceso hormonal relacionado con nuestros huesos. Los carbohidratos trabajan de forma independiente en favor de la actividad prebiótica, que junto a los polifenoles, desarrollan mecanismos de protección de nuestro cuerpo.
Lo otros beneficios de las ciruelas
Aparte de ser rica en carbohidratos y polifenoles, las ciruelas contienen fibra, vitaminas, calcio y potasio. Unos nutrientes que convierten esta fruta en un alimento energético y depurativo. Están especialmente recomendadas para estimular el sistema nervioso y obtener un mejor rendimiento psíquico. Gracias a su bajo contenido calórico, son buenas en dietas para perder peso o mantener la línea.
Las vitaminas que contiene esta fruta, sobre todo la A, ayudan al mantenimiento de las células de la piel, las mucosas y la vista. Si no te gusta el sabor de las ciruelas, también puedes consumirla en formato pasas. Son más dulces que la fruta al natural, pero no pierde sus nutrientes. Comerlas de esta forma ayuda a nuestro aparato digestivo, gracias a que contienen más fibra que las otras.
Como hemos comprobado a través de estas líneas, disfrutar de esta superfruta redunda en nuestro cuerpo. No solo por su sabor, también por su cantidad de nutrientes. Ahora que lo sabes, ¿vas a comer más ciruelas este verano?
