Descubre los mejores platos con sardina. En este artículo hacemos un tour por algunos de los restaurantes asturianos donde puedes probar este delicioso pescado en su mejor versión. ¿Quieres saber también qué beneficios te aportará degustar este pez? ¡Sigue leyendo!
Prueba los mejores platos con sardina
Con el verano bien entrado es muy probable que ya hayas catado distintos platos con pescado. Los hay de muchas clases ya que contamos con multitud de especies de peces. Tantas como formas de cocinarlos. Uno de ellos es la archiconocida sardina. Sin lugar a dudas se trata de uno icónico ya que está muy presente en nuestra dieta. «Apretados como en lata de sardinas» dice la expresión popular. A pesar de su apetecible sabor, existen muchas otras formas de degustarla. Cada cual de ellas es más original de la anterior.
Uno de los mejores platos con sardina lo puedes comer en el restaurante Éleonore, en Salinas (Asturias). La sardina en sal cítrica con helado de vermut 1884 y crema de aguacate es sin lugar a dudas una especialidad. La chef de este establecimiento, Cristina Arias deleita con este manjar a los turistas que acuden a este local a pie de playa tras un baño.
Continuamos en Asturias
El Retiro, en Llanes (también Asturias); ofrece huevo de casa, migas, sardina salada y trufa. También encontramos en este algunas propuestas fuera de la carta como la crema de maíz con sardina salada. Esta última te viene como anillo al dedo si lo que buscas es un plato refrescante. Ricardo Sotres, el chef, apuesta siempre por el producto de temporada. Siempre busca la máxima calidad para ofrecer la mejor experiencia a los comensales.
Otro restaurante asturiano que ofrece uno de los mejores platos con sardina es Quince Nudos. Puedes encontrarlo en Ribadasella. Su chef se llama Bruno Lombán y está especializado en arroces. Sin embargo, esto no le impide meterse de lleno en la preparación de pescados. El que recomendamos se trata de una oblea de maíz, cerdo desmenuzado y lomo de sardina ahumada con chutney y de tomate raf. Suena complejo, lo sabemos. También sabemos que no te arrepentirás al probarlo.
Propiedades de la sardina
Hay muchos motivos para comer este delicioso pescado. Uno de ellos es que no te puedes perder un espeto si veraneas en la costa malagueña. Más allá de la tradición y el sabor, existen diferentes beneficios nutricionales de comer este pescado de temporada. Como todo pescado azul, destaca por sus grasas instauradas. Es decir, por el omega-3. Así pues, a través de este (que nuestro cuerpo no puede fabricar), mejoramos nuestra salud cardiovascular.
A través de él es que disminuimos el nivel de triglicéridos en la sangre y reducimos el colesterol. Además de ello, debemos tener en cuenta que es antioxidante y antiinflamatoria. Por si fuera poco, mejora la función endotelial y disminuye el riesgo de trombosis. Es muy probable que no conozcas esta función concreta. No te preocupes, es fácil de entender. Simplemente es la que regula la buena dilatación del tejido vascular. Previene la vasoconstricción anormal que provoca el colesterol malo.
La Fundación Española de Nutrición (FEN) destaca también que la sardina «casi cubre el 100% de los objetivos nutricionales recomendados para la ingesta diaria de la población». Es una fuente de vitaminas D, A, B1, B12 y B6 Estas favorecen la absorción de calcio y su fijación en el hueso. También cumplen una función clave en el sistema nervioso, muscular e inmunitario. Para más inri, el tratamiento térmico que reciben las que se destinan a conserva convierte las espinas en comestibles. Estas pasan a ser una óptima fuente de calcio. Así mismo, su alto contenido en fósforo contribuye a un funcionamiento de los riñones adecuado. Por último, destacamos el calcio.
Conclusión
Como ya has visto, sobran las razones para disfrutar de este manjar. Si quieres disfrutar de los mejores platos con sardina no tienes por qué dejarte mucho dinero o comer en los restaurantes propuestos. Basta con adquirirlas en tu pescadería más cercana y disponer de una sartén, aceite y limón. También puedes buscar diversas recetas y experimentar con lo que tengas. ¡Las posibilidades son ilimitadas!