El arroz lleva incorporado a nuestra dieta desde cientos de años atrás. Es un alimento que nos aporta minerales como el calcio y el hierro y es rico en vitaminas. Lo que quizás no sepas es que este alimento también nos aporta arsénico, que es esencial para la vida, pero en su justa medida. Su deficiencia o su exceso puede provocarnos problemas de salud, sobre todo el llamado arsénico inorgánico. Para combatir este problema, un grupo de investigadores ha descubierto una variante de la planta del arroz que es resistente a ese compuesto, algo que promete mucho. ¿Quieres saber por qué? ¡Te lo explicamos!
¿Qué es el arsénico?
Lo primero que tienes que saber es qué es el arsénico. Se trata de un elemento ampliamente distribuido en la corteza terrestre. Es un metaloide que se puede encontrar de forma orgánica y de forma inorgánica. El arsénico combinado con carbono e hidrógeno se conoce como arsénico orgánico. El problema está en el inorgánico, que es el arsénico combinado con oxígeno, cloro y azufre. El arsénico inorgánico, incluso en pequeñas cantidades, puede provocar distintos problemas crónicos, daños cromosómicos o cáncer.
Cuando en los cultivos de arroz existe un nivel elevado de arsénico inorgánico, la planta y los granos de arroz tienen más posibilidades de absorberlo y que sea malo posteriormente para nuestra salud. Y, según algunas investigaciones, la ingesta de arsénico inorgánico en la población a través del consumo de arroz y productos derivados podría estar superando la recomendación máxima de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). A esto hay que añadir que el aumento de las temperaturas por el cambio climático contribuye a incrementar el contenido de arsénico en el arroz.
Asimismo, en regiones agrícolas de Asia está aumentando el contenido de arsénico en las aguas subterráneas debido al uso excesivo de herbicidas, fertilizantes, lodos procedentes de aguas residuales, etc. El problema es que el hecho de que el arroz se cultive en campos sumergidos favorece que las plantas absorban a través de las raíces una mayor cantidad de ese elemento que termina introduciéndose en la cadena alimentaria.
La buena noticia es que este problema podría estar en proceso de solucionarse. Ya que un grupo de investigadores ha descubierto una variante de la planta del arroz que es resistente al arsénico inorgánico. Hasta el punto de que este elemento se acumula en los granos un tercio menos que en otras variantes convencionales de arroz.
¿Cómo esta variante de la planta del arroz?
Esta variante de la planta del arroz, denominada Astol1, tiene unas características que facilitan que se pueda cultivar en zonas con elevado contenido en arsénico y que se obtengan granos con menor índice de este elemento. Además tiene otra gran cualidad y es que contiene un 75 % más de selenio. Este mineral destaca por su capacidad antioxidante y de estimular el sistema inmunológico. Además, es capaz de destruir células dañadas reduciendo el riesgo de que aparezcan enfermedades como el cáncer u otras.
En este trabajo han participado investigadores de la Universidad de Heidelberg (Alemania) y de la Universidad Agrícola de Nanjing (China) tras analizar más de 4.000 variantes de plantas de arroz. De esa cifra, solo una consiguió tener las características que estaban buscando. Esa característica significa que en ella se produce el llamado intercambio de aminoácidos en una sola proteína que, entre otras cosas, controla la formación del aminoácido cisteína, que actúa respondiendo contra la sustancia tóxica con el fin de neutralizarla.
En un futuro, esta variante podría utilizarse para producir arroz en zonas contaminadas con arsénico, aprovechando terrenos de cultivo y mejorando la seguridad alimentaria, y dado su contenido en selenio, sería ideal para combatir la deficiencia de este elemento en la dieta humana.
El arroz es un alimento completamente saludable para nosotros actualmente. Este alimento pasa muchos controles sanitarios hasta llegar a nuestros platos y, como hemos dicho, el arsénico es fundamental para nuestras vidas. Por lo tanto, deberías continuar comiendo este sabroso y nutritivo grano. Lo único, que gracias a esta nueva variante de la planta del arroz comenzará a tener menos arsénico inorgánico y será todavía mejor para nuestra salud. Además de que se destruirán muchos menos cultivos y muchas menos plantas arrozales. ¿Qué opinas de este nuevo descubrimiento? ¿crees que puede revolucionar el mundo del arroz?
