¿Puede adaptarse la gastronomía a los constantes avances tecnológicos en los que se ve inmerso el mundo en el que vivimos? La respuesta es sí. El ejemplo lo tenemos en Shanghái, donde en 2012 el chef francés Paul Pairet abrió Ultraviolet, un restaurante multisensorial en el que se da una vuelta de tuerca a la forma de disfrutar de la buena mesa. Te contamos todo sobre este curioso lugar.
Un lugar único
Nada más entrar en Ultraviolet llama la atención su estética, ya que el cliente sentirá como si se hubiese trasladado a otro mundo. Un salón de paredes cubiertas con pantallas de proyección 360º y una única mesa capaz de albergar a diez comensales te dan la bienvenida. Una sensación de sencillez inunda el espacio nada más entrar, pero en el mismo instante de sentarse a la mesa todo cambia. Las paredes comienzan a proyectar todo tipo de imágenes, luces y sonidos, que evocan vida y dinamismo. Es en ese momento cuando el comensal comenzará a experimentar unas emociones que no ha podido vivir antes al visitar un restaurante.
El despliegue tecnológico va de la mano con cada plato que se sirve. No son fuegos artificiales, es una escenografía bien escogida y capaz de transportar al comensal a sitios como un campo de cereal, un prado de animales o a alta mar. Todo ello con imágenes, luces y música acorde a lo degustado. Esta nueva modalidad, cada vez más desarrollada por los diferentes chefs y conocida como psycho taste, es una experiencia multisensorial que combina a la perfección la vista, el oído y el gusto.
La forma de disfrutar
La intención de Ultraviolet y de su creador Paul Pairet es que los comensales sean los protagonistas de un menú compuesto por veinte platos y sus correspondientes veinte escenarios creados con los avances tecnológicos antes explicados. El cliente puede disfrutar tomando un plato de ostras con caviar como si estuviese rodeado de las bravas aguas del Océano Atlántico. A su vez es posible degustar el famoso fish and chips en el ambiente gris y lluvioso de Londres mientras suenan de fondo las inolvidables canciones de la banda británica The Beatles. Y para terminar, el comensal puede degustar el pan trufado en un ambiente que evoca un bosque frondoso y húmedo.
Es cierto que tras Ultraviolet, otros chefs han intentado beber de la propuesta de Paul Pairet, como es el caso de Paco Roncero. El chef español abrió en la isla de Ibiza el restaurante Sublimotion, llegando a ser considerado el restaurante más caro del mundo. Roncero combina la propuesta del chef francés adaptándolo a las características propias del entorno y a su toque personal.
Pairet, el capitán del Ultraviolet
Detrás de todo proyecto siempre hay un capitán que pone todo su esfuerzo en que el barco llegue a buen puerto. Ultraviolet lo tiene, y ese es Paul Pairet.
Nacido en la ciudad francesa de Perpiñán, Paul Pairet ha sido un auténtico trotamundos. Comenzó sus estudios por la rama científica, pero pronto descubrió que su otra pasión era la gastronomía. Estudió en una escuela de hostelería en Toulouse antes de dar un salto en su prometedora carrera. Posteriormente comenzó a viajar por una cantidad considerable de países con la intención de descubrir nuevas culturas culinarias. El chef francés siempre ha destacado sus estancias en Estambul, Hong Kong, Yakarta y Sídney.
Fue en esta ciudad australiana, en 1996, donde comenzó a darle la vuelta a combinar sus estudios científicos y los gastronómicos. Es en este nuevo camino donde empieza a desarrollas los conceptos que posteriormente plasmaría en sus restaurantes, para culminar en Ultraviolet.
En 2005, Pairet decide trasladarse a Shanghái, donde abre Jade on 36, su primer establecimiento, que le valió el reconocimiento de la profesión y de la crítica por las nuevas técnicas introducidas y su cocina de vanguardia. Cuatro años más tarde abre en la misma ciudad el Modern Eatery by Paul Pairet, un concepto diferente a su trayectoria, buscando en este nuevo establecimiento acercarse a la popularidad y la sencillez. Y en 2012 llega Ultraviolet, su revolucionario concepto gastronómico que le ha servido para tener el reconocimiento de la crítica y premios como el que le otorgaron en 2013 por su trayectoria en la gala de los Asia’s 50 Best Restaurants. Aunque el viaje sea largo, si tienes la intención de viajar a esta ciudad asiática, el Ultraviolet te espera.
