Aprieta el calor como cada verano y uno de los alimentos que más apetecen para bajar la temperatura del cuerpo es el helado. Sin embargo, normalmente tomarlo conlleva un cúmulo de calorías y azúcares que no gustan a todo el mundo. Menos todavía a los que quieren mantener su dieta intacta. Pero para estas personas también hay una alternativa muy interesante: los helados saludables. De cualquier fruta, aunque predominen las de temporada porque también son ricas en agua, puedes conseguir deliciosos manjares. Aquí te damos algunos ejemplos o recetas para que aproveches esta opción.
¿Cómo conseguir helados saludables en casa?
Sin duda, la mejor forma de respetar una alimentación sana también durante estos meses calurosos es fabricar tus propios helados saludables, de forma que sepas los ingredientes que comes. La leche suele estar incluida con frecuencia en diversidad de estos productos, acompañando al chocolate. Pero este componente lácteo es muy nutritivo por su aporte de calcio y proteínas de alto valor biológico. Por tanto, puedes añadirlo a tus recetas.
Porque el objetivo, sobre todo, es esquivar con la elaboración casera todo tipo de aditivos o edulcorantes y gluten, algo que sí incorporan los helados de la industria. Al ser una creación tuya para consumir directamente o pronto, no es necesario ese aporte de componentes. Solo tienes que utilizar frutas, yogur griego e incluso algún otro alimento que consideres oportuno. Tú decides cómo quieres que sean tus helados saludables.
Y, ¿cómo puedes hacer esos deliciosos manjares? Tienes dos opciones, siendo ambas muy sencillas. La primera es batiendo los trozos de fruta que te apetezcan para después congelar el resultado en cualquier recipiente idóneo que le dé forma de helado. Si quieres, puedes verter yogur o leche también para darle untuosidad a la mezcla. Con una buena congelación, esos ingredientes no pierden ni sus vitaminas ni sus minerales ni siquiera la fibra (con licuadora, al menos).
Por otro lado, igualmente puedes conseguir frescos polos mediante un jugo de limón o naranja congelado. Incorpora pequeñas porciones de frutas como plátano, kiwi, arándanos, mango o fresas a ese primer componente y después, al molde adecuado para congelar. ¡Disfruta de estos helados saludables ya mismo!
