Con la llegada de junio a Aranda de Duero, también toma su protagonismo especial un producto típico de la gastronomía comarcal. Así, durante todo el mes hasta ocho asadores especializados participarán en unas nuevas Jornadas del Lechazo Asado, ofreciendo sus menús completos por 40 €. Por supuesto, siempre con el cordero lechal como estrella y cocinado en horno de leña, pero junto a las particularidades de cada casa. Además, los preciados vinos de la DO Ribera del Duero acompañan cada año a cada elaboración, que igualmente suele incluir otros productos tradicionales del lugar.
El menú de las Jornadas del Lechazo Asado
La carne asada sobre horno de leña cautiva el paladar de cualquier comensal que desee disfrutar de un exquisito y portentoso manjar cárnico. Pero en la localidad de Burgos este producto adquiere todavía mayor expresión como un producto tradicional y popular, sobre todo en Aranda del Duero. Aquí puedes vivir una sensacional experiencia gastronómica en el mes de junio con las XIX Jornadas del Lechazo Asado. Un animal -el cordero lechal- que vive 35 días solamente bebiendo leche materna y pesa unos cinco kilos, ofrece una carne muy sabrosa.
Cada uno de los ocho asadores especializados dispondrán en su carta de varias recetas y alternativas dentro de los entrantes del menú, a elegir una. Como alimentos protagonistas entre estas opciones resaltan otros embutidos como la morcilla, el chorizo o la berza, así como el torrezno. También setas, pimientos, patatas, croquetas o incluso el Taco de bacalao del Restaurante Aitana.
Luego, como plato principal de las Jornadas del Lechazo Asado, este manjar se presenta junto a una ensalada de la huerta con lechuga de Medina. Este es otro alimento típico de la región burgalesa, que encaja a la perfección con el cordero al horno y en su punto.
Por último, un buen postre pone el broche de oro a través de elaboraciones que pasan por diversidad de recetas. Por ejemplo, la Espuma de arroz con leche de churra o con tierra de galleta y membrillo. O también la Tarta de Hojandre con crema y nata o rellena de un cordón de chocolate, sin dejar a un lado las alternativas de postres caseros de otros asadores.
Dentro de cada menú están incluidos igualmente un vino D.O. Ribera del Duero, escogido por cada restaurante, un café, ‘chupito’ e incluso una Torta de Aranda para comerla junto al trozo de carne.
Los ocho asadores participantes
