El verano ya está aquí. Con él llegan unos meses en los que uno de los alimentos aliados más refrescantes para combatir el calor es, sin duda, la fruta. Piénsalo: ¿qué apetece más que una buena rodaja de sandía, melón o piña? Y no nos olvidemos, por supuesto, de las cerezas. Esta última se trata de una fruta popular tanto en primavera como en verano y, además de ser fresca y sabrosa, esconde una serie de propiedades que hacen de ella un alimento todavía más atractivo. ¿Quieres conocer cuáles son los beneficios inesperados de las cerezas? ¡Continúa leyendo y descúbrelo!
Las cerezas, pequeños bocados de frescor
Aunque no se sabe de manera certera, se cree que la cereza se conoce y se consume desde la Prehistoria. Tampoco se sabe a ciencia cierta dónde ocurrió, pero es probable que el origen del cerezo esté en Asia Menor y que fueran los pájaros migratorios los que lo introdujeron en Europa. Con el nombre de Prunus avium, podría decirse que esta especie del cerezo ha dado lugar a gran parte de las que se cultivan hoy en día. Sin duda, una planta muy apreciada por las civilizaciones de la Edad Antigua. De hecho, tanto romanos como griegos fueron en gran parte culpables de la difusión de este árbol. Sobre todo los primeros, que no contentos con las especies que había hasta entonces, crearon nuevas variedades.
En España, uno de los lugares de referencia del cerezo es El Valle del Jerte. Se encuentra en el norte de Extremadura, y en primavera ofrece un inigualable espectáculo cuando sus más de dos millones de árboles florecen y forman un mar blanco que surca el valle. «Siguiendo una tradición familiar de siglos, las cerezas se cultivan artesanalmente en bancales labrados en las altas montañas del Valle, entre manantiales cristalinos y aire puro. Sólo un entorno así de único, con un microclima privilegiado, pueden cultivarse las mejores cerezas de España», explican desde la asociación de la Cereza del Jerte.
De hecho, España -y en concreto las provincias de Zaragoza, Cáceres, Barcelona, Castellón, Alicante, Rioja, Salamanca, Granada, Jaén y León- se encuentra entre los principales países con producción de cerezas. Además, Alemania, Estados Unidos, la Federación Rusa, Francia, Irán, Italia, Líbano, Rumanía y Turquía, también son referentes mundiales en este sector.
¿Cuáles son los beneficios inesperados de las cerezas?
La cereza es una de esas frutas que más apetecen, entre otras cosas, en un día de calor. Su sabor y su facilidad para comerla hacen de esta fruta una opción muy popular. Pero, como te decíamos al comienzo, cuentan con una serie de propiedades que la convierten en un alimento todavía más completo.
La dietista registrada en Balance one Supplements, Trista Best, según la revista digital gastronómica Eat This, Not That, afirmaba que «Las cerezas no reciben la atención que merecen para ser la fruta llena de nutrientes que son». La pregunta es: ¿por qué? La experta contesta a esta pregunta: «Un beneficio sorprendente de las cerezas es su capacidad para aliviar el dolor de las articulaciones y la hinchazón de la artritis inflamatoria«. Sorprendente, ¿verdad? Tal como analizaba la dietista, la razón de esta propiedad es que las cerezas contienen «nutrientes altamente antiinflamatorios, conocidos como antioxidantes». De ahí que esta fruta sea beneficiosa para tratar estas inflamaciones.
Estudios que apoyan estas propiedades
En 2013, la revista Osteoarthritis Cartilage decidió llevar a cabo un estudio que probase cómo de efectivo era el consumo de cerezas para el dolor de artrosis. Según la revista Eat This, Not That se «proporcionó a 58 adultos no diabéticos con artrosis dos botellas de 8 onzas de zumo de cereza ácida o un placebo para beber a diario durante seis semanas». Al terminar el período de prueba y tras una pausa de una semana, se intercambiaron el tratamiento. Se descubrió que, aunque tratándose de un efecto mínimamente pronunciado, «el zumo de cereza ácida proporcionaba cierto alivio de los síntomas entre los pacientes con osteoartritis estudiados».
No obstante, las sorpresas no acaban ahí. La experta en Salud Ambiental añadía que «comer una taza de cerezas antes de acostarse también podría mejorar la calidad del sueño». La razón es que esta fruta contiene «melatonina natural, una hormona asociada al ciclo sueño-vigilia, que se sabe que aumenta la calidad y la duración del sueño«.
Ahora que ya conoces los «secretos saludables» que esconden las cerezas, ¿a qué estás esperando para comprarlas?
