¿Sabías que en España se cultivan más de 200 variedades de aceituna? A nadie se le escapa la vital importancia que tiene el fruto del olivo para nuestra alimentación y economía. Nos referimos a una de las bases de la dieta mediterránea. Prepárate para conocer alguna de sus clases principales.
España: potencia mundial
España es la primera potencia mundial si hablamos de aceite de oliva. Este título no lo ha obtenido en vano ya que posee dos millones y medio de hectáreas dedicadas al olivar. No es de extrañar que el sabor y las características de la aceituna pueda variar de una región a otra. El clima no es el mismo en todo el país y esto incide sobre el fruto del árbol. Por ello es que los más sibaritas conocen las variedades de aceituna presentes en los aceites antes de comprarlos. A continuación te presentamos algunas de las más relevantes.
Picual, una de las variedades de aceituna míticas
Resulta probable que te suene esta aceituna que acaba en forma de pico. La has visto miles de veces ya que es la más común tanto en España como en el planeta. Jaén, Córdoba y Granada son las tres provincias que más terreno dedican a su cultivo. Por otra parte, podemos destacar de su aceite un ligero picor y amargor. Destaca a su vez la consistencia del líquido, lo que le aporta estabilidad. Este es muy empleado a la hora de conservar alimentos y cocinar.
Hojiblanca
Quienes le pusieron el nombre no es que se la jugaran mucho. Así pues, la parte posterior de las hojas del árbol es de color blanco. Procede sobre todo de Sevilla, Málaga, Granada y Córdoba. Es precisamente en la última provincia donde se encuentra la localidad de Lucena, su mayor productor. De ahí le viene el nombre de lucentina. Son redondeadas y de un calibre medio-alto.
Por ello es que se sirven bastante en la mesa como aperitivo, además de utilizarse para elaborar aceite. Este posee un regusto picante característico y es valorado para freír, además de para aliñar. En Córdoba y Málaga se dice que «crece» en la sartén debido a lo mucho que cunde.
Arbequina
Nos desplazamos al norte. Esta variedad procede de Lérida, Tarragona y el Alto Aragón. De hecho el nombre de esta clase resistente al frío proviene de la localidad leridana de Arbeca. El tamaño del fruto es el menor entre las diferentes variedades de aceituna en España. Su aceite es el más dulce de los que tratamos en este artículo. Especialmente lo caracteriza un aroma afrutado con reminiscencias de manzana, plátano y almendra.
Manzanilla de Sevilla
De forma globosa y de textura tersa y firme. Posee su propio consejo regulador ya que cuenta con la Denominación de Origen Protegida. Se cultiva en la cuenca del Guadalquivir y se fermenta tras la cosecha. Así pues, adquiere un color pajizo y un sabor suave y delicado. Destaca también por tener bastante carne en relación con el hueso, comparada con otras. Al morderla no encuentras el hueso al instante, lo que viene genial para separarlo.
Blanqueta
El origen del nombre es un tanto obvio. Deriva del propio color de la aceituna ya que esta es blanquecina. Se trata de una categoría propia del Levante. En concreto de Alicante, aunque se ha extendido a provincias colindantes como Murcia, Albacete y Valencia. El aceite procedente de los pequeños frutos resalta por su contenido en vitamina E. Hablamos de una que le aporta propiedades anticancerígenas y antioxidantes. Además destaca por un sabor peculiar dulce pero a la vez amargo. Al igual que el de arbequina, posee cierto aroma a almendras.
Conclusión
Esta es solo una muestra del fascinante mundo de los olivos. Existen muchas más variedades de aceituna aparte de las que hemos hablado. Cada una con sus propios matices que la hacen especial. Así pues, no queríamos convertir tampoco el artículo en una enciclopedia. Sin embargo, lo que sí nos gustaría es animarte para que pruebes todas las clases que puedas. ¡Hay una para cada persona y seguro que encuentras tu favorita!
