¿Existen tipos de harinas saludables? Igual no estás al corriente del abuso que se viene cometiendo desde hace un tiempo con respecto a la harina. De esta derivan problemas de salud de los que hablaremos en adelante. ¿Existe alguna solución? Sí. Hoy vas a descubrir varias clases de este ingrediente de las que seguramente ignorabas su existencia. Comencemos.
El impacto de la cuarentena
La harina ha sido uno de esos productos que han pegado el petardazo este año. Una gran cantidad de personas aburridas dio rienda a suelta a su creatividad culinaria durante el confinamiento. Para ello necesitaron harina. Sin embargo, esta no es tan inofensiva como la mayoría de nosotros piensa. Su abuso está relacionado con problemas tan serios como la diabetes y la obesidad. Debemos tener en cuenta que dispara los niveles de glucosa en la sangre ya que sus niveles de fibra son reducidos.
Vayamos por partes. La harina refinada de trigo se obtiene a partir del procesamiento industrial de granos. Los beneficios nutricionales presentes en los granos están presentes en el germen. Es decir, en las partes posteriores. Hablamos de fibra, vitaminas, minerales…
En cambio, la harina refinada se caracteriza solo por hidratos de carbono de rápida absorción y el gluten. Esta solo aprovecha la parte interior del grano. Por lo tanto, si queremos consumir tipos de harinas saludables debemos encontrar las que aprovechan el germen.
Las harinas integrales de grano entero son superiores a nivel nutricional e incluso de sabor. No obstante, son más caras. La gigantesca y creciente demanda requiere de un tratamiento industrial. Los harineros le compran el grano a los agricultores a bajo precio y priman más la cantidad y la calidad.
Además, los agricultores no están para invertir en calidad. Esto se debe a que compiten con otros países europeos mucho más productivos. Sale más caro preparar harina integral ya que esta no puede estar almacenada en un silo por meses sin estropearse. Veamos algunas de sus alternativas.
Tipos de harinas saludables
Harina garbanzos
Si te apasiona el hummus te tiene que gustar esta por fuerza. Destaca por su contenido en proteínas de alta calidad, fibra, minerales y sustancias antioxidantes. Además, posee un índice glucémico bajo. En Oriente Medio se emplea desde hace siglos especialmente en comidas saladas. En caso de que aún no la encuentres en el supermercado puedes prepararla en casa. Es más fácil de lo que parece y resulta más económica y deliciosa. Puedes triturar los garbanzos en una batidora durante cinco minutos y luego filtrar los restos con un colador.
Harina de coco
Es muy utilizada a la hora de preparar panecillos, bizcochos o tartas debido a su sabor dulce. Este procede de los restos de pulpa que quedan tras sacarle la leche al coco. Lo óptimo es mezclar una pequeña cantidad con agua y huevos para proporcionarle humedad. Es rica en proteínas, en grasas saludables y en fibra.
Harina de quinoa
Bastante completa también desde el punto de vista nutricional. Así pues, contiene los ocho aminoácidos esenciales que necesita un adulto. Además, es rica en minerales, vitaminas, proteína vegetal. Por si fuera poco, también contiene la fibra que facilita su digestión. Sopas, postres y bebidas son algunos de los mejores resultados que puede dar esta harina. También se emplea en recetas de panadería. A pesar del boom de la quinoa en la gastronomía occidental, su harina no es muy conocida. Si quieres disfrutar de los beneficios de este «pseudocereal» te aconsejamos experimentar con su harina.
Harina de lentejas
Muy empleada en la India para los panes tradicionales que se asemejan a los crêpes. También se emplea en rebozados y queda muy bien en platos salados. Debemos tener en cuenta que se hace con una legumbre muy saciante y nutritiva. Además, se digiere muy fácilmente. Por otra parte, podemos destacar algunos de sus nutrientes como vitaminas A, del grupo B y C. Los minerales principales que contiene son el magnesio, el hierro y el calcio. Para acabar mencionamos la proteína y la fibra. Sin duda, las lentejas son un alimento completo.
Conclusión
Siempre te apoyaremos a la hora de preparar nuevos platos. Sin embargo, esperamos que tengas en cuenta la información que te hemos proporcionado. Así pues, podrás comprobar de que se habla muy poco de los riesgos que esconde la harina procesada. Por ello es que te hemos propuesto estas alternativas. Es más, puedes preparar algunas de ellas en casa con poco esfuerzo. Esperamos que este artículo te haya servido y te decantes por tipos de harinas saludables.
